El Mandatario garantizó que "no le hago asco a la palabra" en el marco del crimen de tres carabineros en la Región del Biobío.
Respecto del desmarque de la Weichán Auca Mapu, se limitó a replicar que "todas las líneas de la investigación siguen abiertas".
El Presidente Gabriel Boric aseveró en entrevista con miembros de la Asociación de Radiodifusores de Chile (Archi) que el crimen de tres carabineros en la comuna de Cañete "tiene connotaciones terroristas".
"Nos da cuenta de que siguen existiendo grupos cuyas características no quiero adelantar, porque hay diferentes hipótesis abiertas, pero grupos criminales en cualquier caso, que tienen que ser totalmente desarticulados", apuntó este jueves.
El Mandatario acotó que "no me arrepiento" de haberlo calificado como un hecho terrorista el fin de semana: "Un ataque de estas características tiene connotaciones terroristas; podemos discutir por qué (aplicar o no) la ley, es una discusión jurídica respecto de la técnica legal de qué es mejor para obtener condena, pero no le hago asco a la palabra".
"Frente a un atentado de estas características, creo que la condena tiene que ser total, y no debe haber matices en aquello", remató.
Consultado por el desmarque de la Weichán Auka Mapu (WAM) en este caso, Boric se limitó a replicar que "todas las líneas de la investigación siguen abiertas" respecto de las identidades de los responsables.
"No se está actuando a ciegas, hay ciertos pedazos de hilo de donde tirar; no es que los investigadores, Carabineros o la Fiscalía no sepan dónde pararse. Por motivos obvios, no puedo adelantar ni dar detalles de aquello, pero se está trabajando con los mejores recursos del Estado chileno, y además, hemos solicitado apoyo a otras instituciones por si esto fuera necesario", complementó el Mandatario.
Esta jornada el Ministerio Público desarrolló diligencias en el lugar donde fue encontrada calcinada la patrulla con los cuerpos de los policías, esto es, el kilómetro 22 de la Ruta P-72S, en la localidad de Quilaco-Antiquina. Según los antecedentes conocidos, se estableció una distancia de 5,3 km entre ese punto y el sector donde fueron embocados y asesinados a disparos los carabineros.
En paralelo, el delegado presidencial de la Provincia de Arauco, Humberto Toro, planteó en radio Universo que el atentado habría sido perpetrado por seis atacantes, puesto que "el número que uno pudiera suponer (...) al menos dobla la cantidad de carabineros".
Sin embargo, la delegada regional del Biobío, Daniela Dresdner, puntualizó que "lo que corresponde es dejar que la investigación siga su curso porque eso está en beneficio de poder tener los mejores resultados de esta investigación".
"Cualquier cosa que nosotros digamos respecto a la investigación puede afectar los resultados, y eso es algo que nadie quiere que ocurra. Las investigaciones están avanzando, se están poniendo los mejores equipos en el trabajo de esta investigación, con todos los apoyos que se requieren para que avance. Respecto a los detalles, a ninguna de las autoridades de Gobierno nos corresponde darlos, sino a la Fiscalía, que está llevando adelante este proceso", sostuvo.
Por otra parte, Boric anunció que los patrullajes que realizaban los efectivos asesinados, relativos a la revisión de una medida cautelar nocturna, ahora se desplegarán junto con miembros de las Fuerzas Armadas, en el marco del estado de excepción constitucional en la Macrozona Sur.
Tras una reunión entre el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, la ministra de Defensa, Maya Fernández, y todos los altos mandos de la zona, se acordó que "de ahora en adelante, todo ese tipo de patrullaje se va a hacer de manera conjunta: Fuerzas Armadas y Carabineros".
En cuanto a la continuidad del despliegue militar en la zona, relevó que antes de la fatal emboscada, "en la Provincia de Arauco habíamos tenido una disminución muy significativa de los delitos y hechos de violencia, y todos comprenderán que un estado de excepción -su mismo nombre lo dice- debe ser excepcional, y por lo tanto, uno no puede naturalizarlo y pretender que éste se mantenga ad eternum".
"Además del fortalecimiento de la persecución del delito y desintegración de bandas dedicadas a acciones criminales, estamos llevando adelante un proceso de diálogo inédito en la zona con la Comisión por la Paz y el Entendimiento, que también está dando resultados. Entonces lo que pido es que con esto no volvamos a foja cero, porque se había avanzado harto, y tenemos que mantener aquello para entregarle paz a la gente que habita la zona", emplazó el Presidente.
Respecto de la aplazada formalización del general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, el Mandatario reafirmó que "quienes fijan la fecha son los tribunales de justicia y son poderes totalmente independientes del Ejecutivo", al igual que la Fiscalía, que emitió la solicitud para postergar la audiencia hasta octubre.
Dicho esto, y atendido el crimen descubierto en pleno aniversario de la policía uniformada, "es a todas luces evidente y de sentido común que en estas condiciones era muy inconveniente que el general director de Carabineros estuviese sometido a una formalización en estas características".
"No creo que quede en entredicho la autonomía; la Fiscalía toma las decisiones de manera responsable, meditada, y uno no puede decir 'no quiero que haya debate público respecto a determinado punto'. Hubo un debate público, la Fiscalía tomó una decisión basada en los antecedentes del caso; a mí me parece una decisión razonable, pero respeto la independencia del Poder Judicial y la autonomía de la Fiscalía", insistió el Mandatario.
Asimismo, enfatizó que el llamado "criterio Tohá", establecido por el Gobierno para evaluar la continuidad de funcionarios indagados, sigue en pie: "Por el respeto y el mejor cuidado de las instituciones, es importante que si alguien está formalizado -que es una garantía de esa persona-, pueda dedicarse 100% a su defensa en los términos legales, y que no se involucre a la institución en aquello".
Dado que el jefe policial es investigado por responsabilidad de mando en una causa por apremios ilegítimos denunciados durante el estallido social, Boric aclaró que aún sostiene que, en ese contexto, "se realizaron graves vulneraciones a los derechos humanos que fueron constatadas por cuatro organismos internacionales, y no tiene ningún sentido tratar de desconocerlo o hacer como si no hubiera sucedido (...) no me arrepiento de haber levantado la voz en ese momento para decir: 'esto está mal, hay que pararlo'".
Volviendo a los avances en materia de seguridad, planteó que "me parece correcto y deseable que los sectores progresistas y izquierda hagamos propia la bandera de la seguridad. Cuando uno se despreocupa o mira en menos la importancia que tiene para la amplísima mayoría de quienes habitan en nuestra patria, al final se está desconectando del pueblo al cual se supone uno debe representar".
"Como Presidente de la República, lo que quiero es tener la flexibilidad para poder adecuar las prioridades a la realidad del país, y no ponerme como un caballo de carrera con anteojeras y seguir adelante sin importar lo que está pasando. Y la seguridad es la principal prioridad de los chilenos y chilenas y de este Gobierno, y mía en lo personal", destacó.
En ese sentido, Boric aseguró que la importancia de esta agenda "se refleja en hechos, no solamente en palabras y en discursos", por cuanto el acuerdo con el Congreso, conocido como "fast track" legislativo, ha permitido "aprobar más proyectos de seguridad que los que se habían aprobado en todos los últimos periodos" durante su mandato.
Asimismo, resaltó que el Gobierno también se ocupa de impulsar la "cohesión social" con el fin de erradicar la delincuencia: "Los barrios organizados, en donde los vecinos se conocen, en donde hay espacios públicos que funcionan, que están en buenas condiciones, son barrios más seguros".
"Por lo tanto, el fomentar y apoyar a las juntas de vecinos, el recuperar los espacios públicos -como se ha hecho, por ejemplo, con el caso muy violento de los 'narcomausoleos', transformándolos en parques para niños-, (...) llenar esos espacios con cultura y deporte es parte esencial de las características de un Gobierno progresista. Ahí también estamos enfrentando la delincuencia", cerró el Presidente.
"La segunda dimensión tiene que ver con las cárceles", continuó, observando que "la gran mayoría de las personas que cometen delito, en nuestro país al menos, tienen algún pariente que ha cometido delito antes. Si no nos tomamos en serio la reinserción -en particular estoy pensando en la reinserción juvenil-, y no logramos cortar esa cadena, al final seguimos trabajando con una bomba de tiempo".
El Mandatario admitió que "esto puede ser impopular, porque (muchos) dicen que los delincuentes casi que debieran pudrirse en la cárcel, pero ahí se está reproduciendo el delito", de manera que "si no le metemos mucha cabeza, muchos recursos, mucha más pasión a lo que pasa al interior de las cárceles para evitar que se cometan delitos desde adentro (...) y además en materia de reinserción, vamos a seguir teniendo este problema permanentemente".
Por otra parte, "es muy grave cuando cerca de la mitad de quienes están presos están en prisión preventiva (...) tiene que utilizarse con todo el rigor de la ley cuando exista peligro de fuga, y tenemos que pensar en medidas cautelares menos gravosas, que impliquen la posibilidad de tener un control efectivo respecto de esas personas, por ejemplo, las tobilleras o diferentes mecanismos tecnológicos que pueden ayudar a aquello, sin además sobrecargar a Carabineros y a las cárceles".
Aunque "estamos aumentando significativamente el cupo" de los recintos penitenciarios, Boric reiteró la necesidad de tomar "medidas necesarias para evitar el hacinamiento, para trabajar más en reinserción, para inhibir la señal de celulares, para fortalecer y preocuparnos de la importancia de la probidad de Gendarmería".
Respecto de la incursión en Chile de bandas extranjeras dedicadas al crimen organizado, apuntó que "es un proceso complejo de larga data", que se enmarca en "un problema a nivel regional".
"Chile es un país que no está ajeno a las corrientes mundiales respecto al crimen organizado. No es que esté mucho peor que el resto de los países, pero eso no puede ser consuelo en absoluto y por eso nos hemos preocupado, y no todas las reformas en seguridad que hemos hecho son aumento de penas, sino que tiene que ver con cómo mejoramos, por ejemplo, la Unidad de Análisis Financiero; cómo damos mayores herramientas a Aduanas, cómo fortalecemos nuestra presencia en las fronteras", relevó.
En esa misma línea, "hemos planteado algunas iniciativas que han sido polémicas y han generado mucha resistencia, como el levantamiento del secreto bancario. No entiendo cómo a estas alturas, tal como hay tanta premura para poder legislar respecto a otros temas que son importantes, no existe premura para poder desarmar la ruta del dinero en este tipo de organizaciones que funcionan, si están donde está la plata".
"Tenemos que desarmar todo el entramado que tienen, y parte de eso es el entramado financiero. Entonces por eso es muy importante, por ejemplo, lo que se ha hecho con los 'negocios fachada' en el último tiempo, en donde existe la presunción que se utilizan para lavar el dinero obtenido de manera ilícita. Ahora, no hay que estigmatizar a un negocio en particular, pueden ocupar varios de diferentes tipos", precisó el Mandatario.
