Universidad Católica oficializó a Santiago Silva como su primer refuerzo

El delantero uruguayo Santiago Silva se transformó este jueves en el nuevo refuerzo de Universidad Católica, tras la ratificación por parte del cuadro precordillerano del acuerdo con el "charrúa".

Silva es el primer jugador que sumó la dirigencia "cruzada" para el plantel comandado por Mario Salas, que buscará el tricampeonato en el torneo nacional y una destacada actuación en la Copa Libertadores.

El "charrúa" reemplazará al ariete Nicolás Castillo, goleador de los cruzados en el 2016, y liderará la ofensiva de los precordilleranos.

En sus primeras declaraciones como jugador de la UC, Silva expresó que "cuando me dijeron que tenía la oportunidad para venir, tomé la decisión rápidamente porque es un paso importante en mi carrera, venir a una institución tan grande como es esta en Chile. Es un paso más que importante".

En cuanto a los objetivos que tiene, apuntó que "sería muy bueno poder tener un buen pasar en la Libertadores para la institución, para lo personal, para lo grupal y adaptarme rápidamente a lo que es el campeonato chileno. Las aspiraciones son muchas, tanto en lo colectivo como en lo individual".

"Me siento ansioso por conocer a mis compañeros y amoldarme de la mejor manera, con mucha humildad, sacrificio y trabajo. Esa es mi postura desde que inicié jugar al fútbol y estoy ansioso por esperar que lleguen el lunes y encontrarme con ellos. Sé que hay muchos argentinos y bueno, ellos me van a ayudar a adaptarme rápidamente a lo que es Chile", sentenció.

Debutó en el profesionalismo en 1998, en Central Español de Uruguay. En su país militó en River Plate, Defensor Sporting y Nacional. También jugó en Corinthians de Brasil; Energie Cottbus de Alemania; Beira-Mar de Portugal; y Florentina de Italia.

El delantero hizo, además, gran parte de su carrera en el fútbol argentino, donde militó en Newell's Old Boys, Gimnasia y Esgrima de La Plata, Vélez Sarsfield, Banfield, Boca Juniors, Lanús y Arsenal de Sarandí.

En Banfield era considerado un ídolo, a pesar de militar en el archirrival Lanús, pero un problema de pagos por parte del elenco del "Taladro" obligó a Silva a forzar su salida de la institución, llegando como jugador libre a San Carlos de Apoquindo.