El presidente de EE.UU. sostuvo que ley de salud entra en vigor mañana haga lo que haga Congreso.
"Una facción de un partido no puede paralizar el gobierno para que se haga su voluntad", añadió.
Si el Congreso no logra un acuerdo para aprobar la nueva ley presupuestaria, el gobierno federal no podrá pagar sus cuentas.
"Una paralización parcial tendría un impacto económico en las personas inmediatamente", afirmó el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, al comentar este lunes el probable "cierre" del Gobierno después de que el Congreso no se pudiera de acuerdo para aprobar el presupuesto.
Eso sí, Obama sentenció desde la Casa Blanca que "la parte importante de la Ley de Asistencia Sanitaria Asequible (Obamacare) entra en vigor mañana (martes), no importa lo que haga el Congreso".
El mandatario señaló que el Congreso está a tiempo de frenar un cierre parcial del Gobierno esta medianoche, pero no podrá evitar que este martes entre en vigor una parte clave de la reforma de salud, pese a los intentos republicanos de descarrilarlo.
"Una facción de un partido no puede paralizar el gobierno para que se haga su voluntad", añadió.
Obama señaló que es importante que la gente tenga en cuenta que "el gobierno federal es el empleador más grande de este país".
"Las oficinas van a quedar cerradas, los pagos suspendidos, los museos y parques cerrados", advirtió.
El gobierno de EE.UU se prepara para un potencial cierre de gran parte de su sector público ante el estancamiento en el Congreso para lograr un acuerdo sobre su financiamiento.
Las agencias gubernamentales ya comenzaron a hacer planes de contingencia ante la posibilidad de que se cumpla el límite, el 1 de octubre, para aprobar una nueva resolución que permita pagar las cuentas de la nación.
Si el Congreso no logra un acuerdo para aprobar la nueva ley presupuestaria, el gobierno federal no podrá pagar sus cuentas y se verá súbitamente paralizado.
